En España se perdieron 25.200 puestos de trabajo en 2022 por catástrofes naturales

Las catástrofes naturales suponen una larga cadena de consecuencias. Desde el "Barómetro de Catástrofes" presentado en el VIII Simposium del Observatorio de Catástrofes de la Fundación, analizan las socioeconómicas. En el ámbito empresarial, las empresas españolas dejaron de facturar 2.660 millones de euros en 2022 a causa de estos desastres naturales, y, aunque es una cifra elevada, se encuentra por debajo de los 3.213 de 2021. Por otro lado, las empresas no aseguradas perdieron 788 millones de euros. Como un efecto en cadena, esto hizo que repercutiera en el resto de sectores, al suministrar menos productos a las empresas afectadas, lo que supuso un impacto indirecto de 1.356 millones de euros. A pesar de esto, 2022 es para España un año con menos siniestralidad que 2021.

A nivel mundial, y como asegura Pedro Tomey, Presidente del Observatorio de Catástrofes, hay una alta brecha de protección mundial. "Tan solo el 25% de pérdidas económicas por la sequía están cubiertas por el seguro", asegura Tomey. En España, el coste de las indemnizaciones por daños a causa de desastres naturales alcanzó los 280 millones de euros. De ellos, el 90% fue provocado por inundaciones. Los costes de los daños causados está mucho más repartido según el tipo de bienes, que según el tipo de la catástrofe.

El sector que más afectado se ha visto en nuestro país por este tipo de catástrofes ha sido el agrícola. Las lluvias torrenciales y las inundaciones provocaron grandes pérdidas. Aunque otros sectores también se han visto afectados, la agricultura ha tenido que lidiar con las dificultades en su capacidad productiva, al ir tan estrechamente ligada con el clima. En estos casos, la parada productiva es prácticamente total, afectando a los puestos de empleo, donde hubo 12.569 pérdidas. En el resto de sectores, la cifra ascendió a los 7.000.

En total, en el año 2022, los eventos catastróficos en España dejaron unos costes de 2.900 millones de euros, y una contracción del PIB de 1.225 millones. De todos los costes, sólo la mitad estuvieron asegurados, y por otro lado, atendiendo a los costes humanos, los fallecidos por desastres naturales son 45, un dato inferior a la media desde comienzos de siglo. Un informe que revela el gran impacto socioeconómico que las catástrofes naturales acarrean, y que deja un balance positivo respecto al año anterior, aunque con cifras elevadas.

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