Miami Open

El tenis mundial se rinde a Carlos Alcaraz, "sin miedo" para ganar un Grand Slam

Carlos Alcaraz ha conquistado el Open de Miami. Estos son los factores clave que han propiciado el triunfo del español.

El tenis mundial se rinde a Carlos Alcaraz

El tenis mundial se rinde a Carlos AlcarazEFE

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Carlos Alcaraz ha comenzado el año deslumbrando a todos con su buen tenis y con sus números. El español, con solo 18 años y 11 meses, ha conseguido hacerse con el Masters 1.000 de Miami confirmándose como una de las sensaciones de la temporada.

Tras la victoria, el mundo del tenis se rindió a su manera de jugar. Uno de los primeros en felicitarle fue su ídolo, Rafa Nadal, que le auguró un futuro de éxitos. "Juego de los que te levantan del sofá", lo describía Feliciano López o "has nacido para brillar", le escribía en Twitter Paula Badosa, con la que comparte un inicio de año fulgurante.

Pese a todos los elogios, Alcaraz ha reconocido que prefiere ver el triunfo como "un torneo importante, pero nada más". "Lo que viene es mucho más trabajo", admitió después de la final. Entre ese trabajo, algunos de los factores que le han llevado a convertirse en referente.

El físico

Si algo tiene el tenis es la exigencia física. Al comienzo de la temporada, Carlos Alcaraz reapareció con un cambio físico notable y evidente. Como él mismo admitió, el cambio ha ido enfocado a sentirse más cómodo en los partidos largos ya que un partido de Grand Slam se puede alargar hasta los 5 sets y durar, como la última final de Nadal en Australia, hasta 5 horas.

Así, como explicó su entrenador Juan Carlos Ferrero a 'Marca', las dos primeras semanas de su temporada se centraron en el físico y luego ya en el tenis. Con cambios en la alimentación, gimnasio y el trabajo tanto de Alcaraz como de sus preparadores, el tenista murciano ganó varios kilos para estar cada vez más cerca de su estado físico óptimo.

La mente

Si hay otro de los aspectos en el tenis es el de la mente. El estado del rival y las sensaciones propias, los errores no forzados que se puedan cometer o la presión de la pista pueden ser la diferencia entre ganar o perder y en un juego puede haber muchas vidas.

Pese a su juventud, Carlos Alcaraz ha adquirido una madurez en su juego propia de cualquier veterano. Contra Tsitsipas comenzó perdiendo 2-5 para luego ganar el juego, también comenzó perdiendo la final. La mente del murciano le lleva a analizar el juego del rival aún dejándose algunos puntos para luego ser implacable.

El talento

Se puede tener mente y físico, pero no talento. No es el caso de Alcaraz. Las mejoras anteriores han determinado también a que su juego luzca todavía más. Desde que comenzó la temporada, el joven tenista ha dado buena muestra del catálogo de golpes que maneja. Ya deslumbró en Indian Wells, pero en Miami sus actuaciones han levantado al público más de una vez de la silla.

Alcaraz resta, saca y se mueve con agilidad en la pista dejando detalles mágicos como un globo por debajo de las piernas. Pero si hay dos golpes que el murciano ha explotado en este torneo han sido la dejada y la volea, con las que ha ganado varios puntos, entre ellos, el de la final.

Sin comparaciones

Como ha admitido en muchas ocasiones, Nadal es su ídolo y las comparaciones, precisamente por la precocidad, son abundantes. Nadal entró en el Top-10 a poco más de un mes de cumplir 19 años, Alcaraz ocupa desde este lunes el undécimo puesto del ranking ATP a un mes de cumplir esta edad. No obstante, el murciano tiene su estilo propio y, aunque agradece las semejanzas, busca un manera de jugar.

Más que un Next Gen

Alcaraz ha irrumpido en mitad de una generación considerada como la Next Gen que aspira a relevar al Top-3. Lleva 3 de 3 finales ATP y es el segundo en la 'race' solo superado por Rafa Nadal este año. Desde que comenzó el año, ha subido 21 puestos en el ranking. Su objetivo era estar entre los 15 mejores pero ya solo tiene el Top-10 a 29 puntos de distancia. Con el triunfo en Miami, es el tenista más joven en alzarse con este título y el tercero más joven en ganar un Masters 1000.

Sus estadísticas durante la final también dicen mucho de su juego y de lo que puede llegar a ser: 6 aces en el partido, el 75% de sus puntos ganados en el primer servicio y el mismo porcentaje de bolas de break salvadas. En el resto, ganó el 40% de los puntos al restar en el primer saque y convirtió el 44% de las bolas de break. A esto se suman 29 golpes ganadores y una velocidad máxima de saque de 218 kilómetros por hora.

Alcaraz ha ganado su primer gran torneo, el paso clave que puede determinar una carrera estelar. "Los primeros dos días serán para relajarse, dormir, jugar un poquito de golf y estar tranquilos", explicó su entrenador Juan Carlos Ferrero quien admitió que el reto es ahora estar preparado mentalmente para la expectación y la presión mediática. Alcaraz quiere más y ha asegurado que no tiene "miedo" a Ganar un Grand Slam.

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