Open de Australia

El 'milagro' de Nadal en el Open de Australia: de no saber si podría jugar a la final ante Medvedev

Rafa Nadal ha obrado casi un milagro en menos de un mes. El balear ha superado al covid-19, su lesión crónica en el pie y hasta un golpe de calor para colocarse a una victoria de su 21º grand slam y de su segundo Open de Australia.

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"Hace tres semanas veíamos muy difícil o casi imposible estar donde estamos a día de hoy". Solo Rafa Nadal sabe lo que ha pasado en el último mes. El ganador de 20 grandes ha pasado de verse casi fuera del Open de Australia a jugar la gran final ante Daniil Medvedev.

Pero el camino de Nadal en Australia ha sido de todo menos cómodo. El pasado mes de diciembre daba positivo en coronavirus y el 'bicho' se cebaba con él. El propio Nadal llegó a reconocer que se había sentido destruido físicamente.

Pero Nadal superó al coronavirus y puso rumbo a Australia tras más de medio año sin jugar. Con una lesión crónica en su escafoides -síndrome de Müller-Weiss, Nadal no sabía si podría competir con los mejores. Pero su capacidad de sufrimiento le llevó a ganar el torneo de Melbourne.

El calor y Shapovalov llevan a Nadal al límite

La no participación de Djokovic centró la previa del Open de Australia, pero Nadal esos días fue cogiendo buenas sensaciones. Comenzó el Open de Australia y Nadal fue pasando rondas hasta los cuartos de final. Ahí, el balear estuvo al filo del ko. Un golpe de calor ante Shapovalov llevó el cuerpo de Rafa hasta el extremo de la resistencia.

Pero el balear sobrevivió y resurgió ante el canadiense para certificar su presencia en semifinales en el quinto set. Matteo Berrettini esperaba a Nadal en la penúltima ronda del Open de Australia, pero Rafa no falló. Superó al italiano y se metió en su sexta final en Melbourne.

Ahora, solo el ruso Daniil Medvedev, el que será nuevo número 1 del mundo y el tenista que parece destinado a dominar el circuito, separa a Nadal de ser el tenista con más grand slam de la historia, por encima de Roger Federer y Novak Djokovic. El domingo, último capítulo de la odisea australiana de Nadal.

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