Pesca
Los siluros, un depredador que amenaza el ecosistema del río Guadalquivir
La presencia de siluros ha desatado la polémica en el Guadalquivir. Esta especie invasora está amenazando la supervivencia de otras y hay que frenar su expansión. Los ecologistas piden evitar la pesca deportiva y los pescadores insisten en que ellos no pueden pescarlos.
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No es un tiburón pero sí el depredador acuático más peligroso de nuestros ríos. Los siluros amenazan los ecosistemas de los ríos españoles y en el Guadalquivir están alerta al haberse visto un siluro de 100 kilos.
Esta especie invasora devora todo lo que encuentra a su paso: palomas, patos adultos y a veces hasta se comen entre ellos.
"Llegan a comerse animales que están en la orilla porque tienen esa capacidad de salir un poco del agua hasta un metro y comerse algo que está paseando por allí", explica Juan Cuesta, de ecologistas en acción de Andalucía
Una capacidad que ahora tiene en vilo al Bajo Guadalquivir, porque allí ha sido avistado un ejemplar de más de 100 kilos.
"La gente se entretiene viendo a los siluros comerse las palomas que se posan pero donde no están acostumbrados es en Sevilla", explica Cuesta sobre lo que ocurre en el río Ebro a su paso por Zaragoza.
¿Pero cómo ha llegado hasta el Guadalquivir? La hipótesis que barajan los ecologistas es la suelta intencionada de ejemplares por pescadores a los que les gusta capturarlos como reto.
Por eso es a ellos, a quienes practican la pesca deportiva, a quienes se les pide que ejerzan su hobbie con conciencia. Y es que el siluro puede acabar con especies en peligro de extinción y desde luego pone en jaque la biodiversidad de las marismas.
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El siluro ya se ha extendido por España y ahora amenaza a las marismas de Doñana. Los ecologistas piden medidas y es que la presencia de siluros se ha convertido en un problema para los ríos españoles.
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