Un salto base con esquís que cautivó a Marta Jiménez: "La sensación fue épica"

Fue en un viaje a los Alpes franceses, a la estación invernal de Morzine. Marta Jiménez y su compañero de aventuras probaron allí un deporte que cuenta con pocos seguidores en nuestro país. Se trata de combinar el esquí con el salto base. Dice que lo entrenaron poco, que fue llegar y lanzarse al vacío en una pared con más de 100 metros de altura. Hablamos con Marta Jiménez de su salto.

"Tienes una bala, una sola oportunidad. Tienes que despegar bien de la rampa. La verdad que tuvimos una sensación brutal", reconoce Marta a Antena 3 Deportes. "Aluciné. De las actividades más adrenalínicas que he podido hacer en mi vida. Una liberación de tensión brutal", explica Marta Jiménez.

Eligieron uno de las zonas de salto que la estación invernal acondiciona para esta actividad. Cerca de sesenta metros en caída libre hasta la apertura del paracaídas. Después de evaluar las condiciones meteorológicas, era importante que no hubiera viento, Marta se lanzó. "Fue como ¡buaaah! ",explica Marta de forma expresiva.

"Hasta que no noté que el paracaídas se abría no pensé que todo salió bien", reconoce Marta Jiménez.

Los saltadores base temen las ráfagas de viento, un factor que puede poner en riesgo sus vidas. "Vas en caída libre, si en ese momento te entra una ráfaga de aire puedes voltear", explica Marta.

Otro factor de seguridad para ellos son los metros de caída que se tienen para ejecutar el salto. Marta nos comenta que "me siento segura con una altura, mínimo, de sesenta o noventa metros". Bastante menos que los saltos que Marta y su compañero realizan cuando hacen su actividad preferida: el paralpinismo. Un deporte que junta la escalada y el salto base, del que Marta es toda una experta.

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