Un maratoniano atípico

El peluquero maratoniano que adora la comida rápida

Daniel Jiménez aspira a ser el europeo más joven en correr 100 maratones. Disputa uno por semana desde que comenzó el año aunque no destaca, precisamente, por su dieta estricta y sus entrenamientos frecuentes.

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El amor por los maratones de Daniel Jiménez comenzó cuando un cliente de su peluquería le dijo que iba a correr la media maratón de Tarragona, su ciudad. Daniel se animó a acompañarle y no paró desde ese día.

Este peluquero de vocación "mi peluquería es la maratón más bonita que tengo", tiene decorado su local con los 94 dorsales de los maratones que ha disputado.

"Fui el primer español en correr cuatro maratones en cuatro días"

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Ahora, aspira a convertirse, a sus 33 años, en el europeo más joven en llegar a los 100 maratones disputados.

Lleva corridos 94 maratones en poco más de siete años

"Probablemente, el 100 sea el maratón de Londres, en el que haré de liebre para hacer unos 3:35' porque la aspiración de Daniel nunca ha sido, como la de la mayoría de los maratonianos, acortar sus marcas.

Entrena una o dos veces por semana y nunca muchos kilómetros. Su entrenamiento son, básicamente, los maratones que corre frecuentemente. "Hago unos 42 ó 43 kilómetros a la semana. Normalmente la gente corre 80, 90, 10...". Pero lo más sorprendente de Daniel es su amor por la comida, digamos, poco saludable. Una dieta que no parece casar mucho con un deportista como él.

Ni entrena frecuentemente ni sigue una dieta estricta

"Hace 15 ó 16 años que no como verdura o pescado. Mi plato favorito son los macarrones"

Presume de no vigilar su dieta incluso cuando se acercan las pruebas de resistencia. "Una vez le dije a mis compañeros de carrera que, si llegaban al kilómetro 42, les decía lo que había cenado la noche anterior: dos hamburguesas con queso, salsa, patatas y dos refrescos".

"Mi mejor tiempo lo hice después de una copiosa cena"

Reconoce que su mejor marca en el maratón, 3:18' la realizó en Almagro después de una copiosísima cena: "Después de la prueba me comí unas migas manchegas con mucho embutido". Así es este original peluquero runner que disfruta de todo lo que hace con una sonrisa: "Con correr no me ganaré la vida pero gano mucha vida corriendo".

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