Los hermanos Pou abren una nueva vía en la cara norte del Cashan

No es la primera vez que hablamos sobre los hermanos Pou ni tampoco la primera vez que informamos sobre sus aventuras en su expedición en Perú.

Iker y Eneko se encuentran en los Andes, donde están logrando abrir nuevas vías en algunos de los colosos andinos.

Y la última noticia es que los hermanos Pou han logrado abrir una nueva vía en la cara norte del Cashan (5.716 metros). Los problemas esta vez llegaron cuando decidieron descender por el lado contrario de la montaña y se quedaron sin comunicación durante varias horas.

"Cuando llegamos a la cima todo está muy escarpado. Miramos hacia los lados y nos damos cuenta de que el descenso va a ser muy difícil. Descartamos automáticamente hacerlo por donde hemos subido: demasiados rápeles y además peligrosos. Nos están fallando los walkie-talkies y la comunicación con Alex (el cámara) cada vez es mas difícil, pero conseguimos informarle que hemos llegado a la cumbre. El problema es que a partir de ahí se nos corta totalmente la conversación, justo antes de que decidamos tirarnos hacia el otro lado… Ya no hay contacto visual tampoco, y el descenso resulta penoso, cansado, y alternando destrepes en nieve con rápeles de fortuna sobre muros verticales de roca·, explican los hermanos Pou.

"Tenemos que poner toda nuestra experiencia para bajar sin sufrir ningún percance. Es lo que tiene este alpinismo de exploración y de vanguardia. Ahí arriba eres totalmente autónomo y cuando te adentras en un terreno agreste, alto, difícil y desconocido, solo tú, y tu habilidad y experiencia acumulada en muchos años de montañas, te pueden sacar sano y salvo del atolladero. Casi cinco horas después de iniciado el descenso, y cuando ya se estaba haciendo de noche, logramos llegar de vuelta a la tienda. Allí nos esta esperando Alex, que se funde con nosotros en un largo abrazo, mientras durante más de media hora no puede contener las lagrimas", reconocen los alpinistas vascos.

La nueva vía, bautizada como 'Bizirik' (Vivos), tiene un recorrido de 980 metros y unas dificultades de M.6 y 85º. Iker y Eneko la lograron abrir el pasado 21 de junio. Con esta, ya son 12 las vías que los hermanos Pou han abierto en la cordillera de los Andes.