Crisis Luis Rubiales

Las revelaciones del New York Times: "Jorge Vilda quería asegurarse de que estuvieran en la cama"

Una investigación del New York Times, con entrevistas a diez mujeres, denuncia "más de una década de sexismo" en el fútbol femenino español.

Jorge Vilda y Luis Rubiales abrazados tras la consecución del Mundial

Jorge Vilda y Luis Rubiales abrazados tras la consecución del Mundial EFE

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Una investigación del New York Times, con entrevistas a más de diez mujeres que trabajan en el fútbol femenino español, denuncia "más de una década de sexismo", de "paternalismo" y "abuso verbal" hacia las futbolistas. El trabajo ha sido realizado tras la crisis desatada por el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso después de la final del Mundial femenino. Las entrevistadas lamentan un trato vejatorio por parte del presidente federal Luis Rubiales y los exseleccionadores Jorge Vilda e Ignacio Quereda.

Rubiales, un "chovinista egocéntrico"

Beatriz Álvarez, presidenta de la Liga femenina, califica a Rubiales de "chovinista egocéntrico", que nunca mostró interés en la liga de fútbol femenino y que dirigió su deporte basándose en "el menosprecio y la humillación". Señala asimismo que la RFEF es una "estructura corrupta".

Vero Boquete, excapitana de la selección española, relata que entre 2015 y 2017 el entonces seleccionador Jorge Vilda era muy controlador con las jugadoras: quería que estuvieran "donde podía verlas" cuando se reunían para tomar un café y también decidía dónde se tenían que sentar durante las comidas. Cuenta la jugadora de la Fiorentina que Vilda quería que las futbolistas "dejaran sus puertas abiertas por la noche para que pudiera asegurarse de que todas estuvieran en la cama".

Por su parte Ana Muñoz, quien dejó su cargo de vicepresidenta de integridad de la RFEF en 2019, relata al diario neoyorquino que se sentía como un elemento "decorativo" en su puesto de trabajo. Muñoz lamenta que quince de los 18 miembros de la directiva eran hombres.

Jenni Hermoso ya ha denunciado a Rubiales

Rubiales sigue suspendido de su cargo de presidente de la RFEF por la FIFA por su comportamiento en la final de la Copa del Mundo: se agarró los genitales en el palco al celebrar la victoria y besó en la boca sin su consentimiento a la futbolista Jenni Hermoso. La jugadora ya ha formalizado su denuncia, un paso que motivará la presentación de una querella por la Fiscalía.

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