Real Madrid

El debate del '9' arrecia con el Real Madrid tieso en ataque

El Real Madrid lleva un gol (y a balón parado) en los últimos tres partidos ante Atlético, Barça y Betis. Si la temporada termina sin más títulos... ¿revisará el club blanco el plan 'Benzema 2024'?

Benzema y Vinícius se abrazan en Balaídos

Benzema y Vinícius se abrazan en Balaídos Getty Images

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El Real Madrid de 2023 puede ser Jekyll o el señor Hyde. Capaz de sembrar el pánico en Europa con su 2-5 en Anfield al Liverpool, después acumula tres partidos consecutivos marcando un solo gol... y a balón parado. Una mala racha que arrancó con el Atlético de Madrid, se confirmó con El Clásico en Copa del Rey y ha hecho saltar las alarmas tras el 0-0 en el Villamarín ante el Betis. Los blancos acumulan en Liga 47 tantos, uno más que el Barcelona; son los máximos goleadores del torneo doméstico. Entonces, ¿qué está ocurriendo? ¿Le han cogido el tranquillo los rivales?

Hemorragia tras Qatar

Desde septiembre de 2021, hace más de un año, los merengues no encadenaban tres partidos sin ganar. Están a nueve puntos del Barça a falta de 14 jornadas, una distancia nunca remontada a estas alturas en la historia de la Liga. Más que una remontada, parece un milagro. El Real Madrid se ha desangrado desde el Mundial de Qatar: ha perdido 12 puntos de 30 posibles, acumulando tres empates y dos derrotas en diez jornadas para ganar solo el 60% de los puntos posibles. El combinado ha perdido solidez y regularidad. No obstante, antes del parón estaba a solo dos puntos de los blaugranas.

Tras la primera jornada disputada después del Mundial, los de Carlo Ancelotti terminaron el año empatados tras ganar el Madrid en Valladolid y el 1-1 entre Barcelona y Espanyol en Nochevieja. Desde esa igualdad a puntos se han repartido otros 27: los de Xavi se han dejado solo los tres de Almería y los blancos esos 12. Las curvas empezaron con la derrota en el campo del Villarreal, a la que se sumó la de Son Moix ante el Mallorca. A esos seis puntos hay que añadir los empates en casa ante Real Sociedad y Atlético, además del último ante los béticos en Sevilla.

Carletto ya ha dado su visión del problema en rueda de prensa: "Se podía hacer mejor, con más eficacia arriba, hemos salido bien desde atrás, hemos salido bien entre líneas, nos ha faltado eficacia, un centro menos, un balón filtrado menos... En los otros tres partidos hemos marcado un gol y a balón parado, es bastante evidente lo que falta, tenemos que ser más efectivos. A veces el equipo rival se cierra, pero tenemos la calidad y hay que hacerlo mejor. Más eficacia y menos regate, más contundente, se puede tirar desde fuera. Es un aspecto que tenemos que mejorar".

Vini pierde duende

La sensación es que al Madrid, como colectivo, le cuesta elaborar ante equipos que se cierran en bloque bajo. Si a eso le sumamos que necesitan muchas ocasiones para perforar la red, el amago de crisis está servido. El de Reggiolo, perro viejo, sabe que sus delanteros se han quedado secos en el peor momento posible de la temporada. Y la sequía de los blancos arriba, más allá de la infrautilización de Marco Asensio y la reciente lesión de Rodrygo, tiene nombres propios: Karim Benzema y Vinícius Junior. Ambos atraviesan un bache tras brillar en Liverpool con sendos dobletes.

El extremo brasileño, hoy por hoy el futbolista más determinante del club, lleva dos goles en los últimos 16 encuentros ligueros (Girona y Valencia). Fuera de casa no ha marcado desde la jornada 3, cuando lo hizo ante el Espanyol el pasado 28 de agosto; diez duelos consecutivos sin ver puerta lejos del Santiago Bernabéu son muchos. Siempre en el ojo de huracán, el ex del Flamengo ha perdido duende y casi siempre recibe lejos del áera o muy cubierto por sus oponentes, quienes han aprendido a sacarle de los partidos sea por lo civil o por lo criminal.

Pero no está mejor el vigente Balón de Oro. Benzema acumula hasta seis lesiones musculares en el cuádriceps de su pierna izquierda desde septiembre. Entre medias se ha perdido 12 encuentros y se ha visto inmerso en una agria polémica con Deschamps tras perderse el Mundial con Francia. El galo viene de marcar 44 goles en 46 partidos, mientras que esta campaña lleva 18 tantos en 26 choques. Números buenos, pero lejos de la excelencia pretérita. Sus casi 36 años tampoco le echan un cable entre tantas visitas a la enfermería. Con todo, lleva 12 tantos desde que acabó la Copa del Mundo y sigue tirando del carro.

¿Benzema 2024?

Sin embargo, el eterno debate sobre el '9' vuelve a arreciar. El Real Madrid no fue al mercado en busca de un delantero centro puro porque consideraba que con Benzema y los tantos de la segunda unidad tenía cubierta la faceta goleadora. El francés no tiene un suplente de garantías, pues Mariano ni siquiera entra en los planes del técnico italiano. El canterano uruguayo Álvaro Rodríguez, poderoso atacando los balones aéreos, se antoja la única alternativa para los minutos finales cuando los encuentros se atascan. Asimismo Endrick, la nueva perla brasileña, no llegará hasta julio de 2024.

Entretanto, y con la renovación de Benzema aún no finiquitada, en los despachos del club de Chamartín siguen estudiando la necesidad de fichar a un ariete de referencia de cara a la temporada que viene, máxime cuando Mariano termina contrato. Con las malas experiencias del español y de Luka Jovic todavía presentes y tras el fiasco de la operación Mbappé el pasado verano, la dirección deportiva había confiado su ataque a Karim hasta 2024, momento en que por fin la entidad se desprenderá además de Eden Hazard, estrella venida a menos que condiciona las arcas merengues.¿Reconsiderarán su postura si la temporada acaba sin títulos?

Bien apueste por el crecimiento de canteranos como Álvaro Rodríguez, bien busque acertar esta vez con un nuevo suplente tipo Jovic-Mariano o decida alargar la vida útil de Benzema hasta que el año que viene venga un monstruo llamado Haaland o Mbappé, lo único seguro es que esta temporada el Madrid necesita recuperar la mejor versión del lionés si quiere aferrarse a cualquier esperanza de remontada. Ese es el cuadro a dos semanas del Clásico liguero. Antes, recibe al Espanyol y después tendrá los ojos en puestos en San Mamés, donde espera que el Athletic Club meta mano al Barça.

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