Jorge Molina, ante Mantovani

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JORNADA 22 PRIMERA DIVISIÓN | GETAFE 0-0 LEGANÉS

Getafe y Leganés se anulan bajo la nieve en un partido de empate a cero

Bajo una intensa nieve, el Getafe y el Leganés cerraron el derbi del sur de la capital con empate a cero. La primera parte no tuvo historia y en la segunda el cuadro pepinero supo frenar las ofensivas azulonas, que llegaron a disponer de hasta dos disparos al poste.

Dos disparos al poste de Vitorino Antunes y Jorge Molina permitieron al Leganés salir vivo (0-0) con un punto del Coliseum Alfonso Pérez, dónde el Getafe fue mejor en el derbi madrileño y gozó de las mejores ocasiones para llevarse la victoria.

Getafe y Leganés se citaron por primera vez en su historia en Primera en el Coliseum Alfonso Pérez y el derbi, con esa rivalidad sana entre dos municipios cercanos, se vio empañado por la climatología.

La lluvia, el frío y la nieve condicionaron el choque y el estadio no se llenó, aunque presentó un gran aspecto en sus gradas.

El Getafe presentó un once muy ofensivo, con Ángel Rodríguez y Jorge Molina en la punta, pero el Leganés, bien plantado con una defensa muy ordenada, no dejó apenas espacios para que los azulones se sintieran cómodos.

El Leganés, con demasiado respeto por su rival al principio, fue cogiéndole el ritmo al partido con el paso de los minutos a la vez que Gumbau y Brasanac fueron entrando más en juego, pero esa mejoría no llegó acompañada de profundidad.

Guerrero estuvo demasiado solo arriba y Djené y Bruno apenas pasaron apuros para defender. Antes del descanso, a los 39 minutos, Jorge Molina recibió dentro del área, se revolvió ante Mantovani y disparó cruzado con la pierna derecha un balón que Cuéllar rozó para evitar el gol.

Nada más comenzar la segunda parte el Getafe tuvo otra ocasión muy clara para abrir el marcador. Fue con un disparo de falta de Vitorino Antunes que se estrelló en el poste izquierdo de Cuéllar y el rebote le pegó en el cuerpo al portero del Leganés.

Esa acción dio paso a dos minutos locos del Getafe en los que pudo marcar en otras dos ocasiones, en ambas con Jorge Molina de protagonista. Una con un mano a mano que desbarató Cuéllar y otra con un remate de cabeza que se estrelló en el travesaño.

El Leganés frenó el vendaval azulón como pudo y la nieve que comenzó a caer le echó una mano porque gracias a ella el ritmo del partido bajó y ambos equipos congelaron sus ideas durante bastantes minutos.

En los últimos compases el encuentro, que había decaído en intensidad, languideció con el permiso del Leganés, que dio por bueno el punto, y con la sensación del Getafe de querer y no poder.

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