Un Barça a medio gas golea al Cádiz en un partido que se detuvo 1 hora por la emergencia médica de un aficionado

El equipo catalán se ha llevado los 3 puntos en su visita al Nuevo Mirandilla y siguen la estela del Real Madrid en la Liga. El Barça no necesitó ni mucho menos su mejor versión para doblegar a un Cádiz que planteó un partido físico pero que se hundió con el primer gol de De Jong (minuto 50). Los gaditanos, sin puntos y sin goles.

El Barça de Xavi llegó lanzado al Nuevo Mirandilla, un campo en el que no han conseguido hacerse con la victoria en las dos últimas temporadas, pero en un partido en el que partían como favoritos indiscutibles. El Cádiz, en la última posición de la Liga (0 puntos y 0 goles a favor), y con una afición entregada al equipo pese a un inicio desastroso apoyó a los suyos desde que rodó el balón.

El Cádiz aguantó la primera parte

Los de Sergio García hicieron una primera parte más que seria, con una línea de 4-4-2, apoyándose en transiciones defensivas rápidas y eficaces y con un despliegue físico admirable de todos los jugadores. Solo un par de ocasiones claras del Barça y un tiro al palo de Rapinha incomodaron a Ledesma, los culés, sin ritmo, sin casi ideas y con un once con 9 cambios respecto al partido de Champions, se fueron al descanso con 0-0.

Al Cádiz ya se le vio algo más cansado en el inicio de la segunda mitad y el Barça en cuanto subió una marcha desequilibró el partido, un gol de rechace de De Jong dejó helado al Nuevo Mirandilla, que tuvo una actitud ejemplar, ni un solo pito, ni una queja, hoy no tocaba.

El Barça subió una marcha y sentenció en 5 minutos

Xavi también aprovechó para meter toda la pólvora y el que mejor lo aprovechó fue el de casi siempre, el polaco Robert Lewandowski, que tras 9 minutos en el campo puso el segundo en el marcador y su 6º en esta Liga.

Un problema de salud de un aficionado detuvo el partido durante 1 hora

Sin embargo, la peor noticia del partido llegó en los últimos 10 minutos. Al parecer, un aficionado sufrió un grave problema de salud en la grada y los servicios médicos tuvieron que atenderle y realizarle masajes cardiorrespiratorios durante más de media hora, el encuentro estuvo parado durante más de 1 hora y los jugadores se fueron al túnel de vestuarios.

Una hora después se decidió reanudar el partido, del que solo quedaban por disputarse 10 minutos más añadido. El aficionado, que abandonó el estadio en camilla y con pulso, fue trasladado a un hospital cercano. Ya en la reanudación el Barça sentenció más si cabe el partido con un tanto de Ansu Fati y otro de Dembelé.

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