Escapan de Cuba a Miami en ala delta: "Hay que estar muy desesperado"

El pasado sábado dos pilotos cubanos huyeron del país en un ala delta. Despegaron desde el reporto residencial de Tarará (La Habana, Cuba) y, horas después, aterrizaron en Cayo Hueso (Miami. Estados Unidos). Estas dos localizaciones están separadas por 158,57km. Para realizar este trayecto utilizaron un ala delta tipo "trike", este modelo dispone de un motor propulsor. El avión ultraligero fue sustraído del Club de Aviación de Cuba. La matricula de la aeronave es CU-U 1619.

Calificados como "pilotos desertores"

En cuanto tocaron tierra fueron arrestados por la autoridad local. Ambos fueron identificados, se trata de Ismael Hernández Chirino y David López Alfonso. Son pilotos comerciales y después de los hechos acontecidos han sido calificados como "pilotos desertores".

Walter N., jefe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, ha informado en su cuenta de Twitter que los dos cubanos fueron puestos "bajo custodia de la Patrulla Fronteriza". En esta situación los pilotos quedan a la espera de la decisión que tomen las autoridades.

Las reacciones no han tardado en llegar. Una de las primeras personas en pronunciarse fue Laura Hernández Chirino, hermana de Ismael. Esta pide a las autoridades estadounidenses que "no deporten" a su hermano y a su compañero. Laura lo tiene claro porque es consciente de que "si ellos regresan el problema que se van a buscar no tiene palabra, no se compara con nada".

"Fue una locura todo lo que hicieron, pero maravillosamente les salió bien y están bien"

Otra persona que atendió a los medios fue Yaneisy, esposa de David. En primer lugar se alegra de que los dos pilotos hayan conseguido su objetivo. "Fue una locura todo lo que hicieron, pero maravillosamente les salió bien y están bien". Al igual que Laura, insiste en que "no los deporten".

Antena 3 Deportes ha ido hasta el Aeródromo Eduardo Castellanos para hablar con Jorge Riola, instructor de vuelo en la Escuela de Aviadores de Villacastín (Segovia). Jorge afirma que "es un viaje muy arriesgado". Las condiciones del vuelo no eran las idóneas y eso provoca que se corran muchos riesgos. Ante una situación de emergencia "sobre tierra se puede hacer un aterrizaje de emergencia, pero sobre agua no".

Un viaje muy arriesgado

Otro factor que tuvieron que tener en cuenta es el combustible. La aeronave, con el depósito lleno, "tiene una autonomía de dos horas y media". Haciendo cálculos del consumo y la distancia, Jorge asegura que "los pilotos debieron llegar muy justos".

"Hay que estar muy desesperado para hacer algo así"

Eso sí, está seguro de que "los pilotos tenían que tener 100% seguro de que todo iba a salir bien". A pesar de ello, y teniendo todos los factores en consideración, Riola concluye que "hay que estar muy desesperado para hacer algo así".

El ala delta tipo "trike" despegó y consiguió aterrizar según lo previsto. Ahora está por ver cuál es la decisión que tomar las autoridades estadounidenses sobre qué hacer con los dos "pilotos desertores". De momento continúan bajo custodia de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.

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