El piloto Bruno Méndez salva la vida de un senderista de 67 años que sufrió un paro cardíaco

Mira que ha ganado carreras en la pista, pero como esta victoria ninguna. Hace unos días Bruno Méndez le salvó la vida a un hombre que hacía senderismo y cayó quedando inconsciente. Bruno no se lo pensó y se lanzó a hacerle el boca a boca. Una maniobra vital que le salvó la vida.

A Bruno le gusta todo lo que tenga un motor potente, sabe explotar perfectamente su hablidad con un volante. Fue campeón de Europa de F3. Hace nada cambió el asfalto por la montaña, otra de sus pasiones. Al llegar a un pozo, en el río Barayo, en Asturias, se encontró con un senderista en apuros que había sufrido una caída en una zona resbaladiza dejándole inconsciente.

El senderista se había luxado un hombro y sufría un paro cardiaco. Bruno no lo dudó y le realizó el boca a boca. Por eso aconseja a todo el mundo aprender a practicar una RCP. "Pensé que tenía que hacer algo y hice la reanimación", asegura Bruno.

Eugenio caminaba con su mujer. Gracias a ella, a la novia de Bruno y a otra pareja más, se le pudo salvar la vida.

Pero sobre todo fue fundamental el helicóptero de emergencias, que no lo tuvo fácil por lo inaccesible de la zona.

El ángel de la guarda de Eugenio dice que la tensión de las carreras le ayudó a sobrellevar la situación.