El capitán de la Selección española, sin ser el centro de todas las miradas, ha llevado a la Selección a lo más alto, dando una lección de vida a todos los aficionados del baloncesto.
Emocionado, no sabía como definir las sensaciones del momento: "Esto es increíble. No tengo palabras para describir todo lo que siento. Hemos hecho un torneo muy serio desde el principio y ha sido muy importante el grupo que tenemos", dijo.
Precisamente, ese grupo se ha convertido en una familia, teniendo más presente que nunca a la suya: "Se lo dedico a mi padre, a mi hermana y a mi abuelo, que murió este verano. Sin ellos no estaría aquí, sin ellos no podría levantar la copa de campeón del mundo.", señaló emocionado.
En las dificultades, los jugadores valientes se hacen fuertes y España, con su capitán, siempre confió: "A medida que transcurría el torneo hemos ido a más. En los momentos importantes se ha visto a la mejor Selección. Somos merecidísimos campeones del mundo", agregó el alero.
"Sabíamos que si queríamos llegar a una final y ante un equipo como el de Argentina teníamos que dar un plus. Todos hemos estado concentrados en todo el torneo y hemos sabido sufrir y a la vez disfrutar en la pista", continuó.
"Ésta es una de las mejores selecciones en las que he podido jugar. Y este año ha sido muy especial para mí. Ha sido una gozada poder capitanear a este equipo", finalizó.
Pero no Rudy, el placer es nuestro. Ha sido un honor para nosotros tenerte como capitán. Contigo hemos sido campeones del mundo.