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RÉPLICAS POR 20.000€

¿Quiere usted un Velázquez?

¿Quién se puede permitir el lujo? La alternativa pasa por los copistas, profesionales que empezaron a imitar la téncica de los grandes y que ahora trabajan por encargo.

No es un museo, pero aquí hay cuadros de Velázquez, el Greco, Goya, Rubens... bueno, copias exactas.

Rosa es copista en 'El Prado'. Licenciada en Bellas Artes empezó hace cuarenta años para perfeccionar la técnica, ahora es una pasión. Ana también acude todos los días con su maletín de pinceles a trabajar al museo... suele pintar por encargo.

El Prado es el único museo español que les permite trabajar. Las normas para hacerlo se endurecen cada año. Sólo pueden coincidir 16 a la vez. El acceso a algunas de las obras más emblemáticas está prohibido y tienen muy restringido el espacio en la sala, para no molestar al visitante. Con esto aseguran que no se ganan la vida pero les aporta otras cosas.

La copia no puede abandonar el museo hasta que no está terminada, un mes y medio aproximadamente, después estas reproducciones de los grandes pintores pasan a decorar las casas de los amantes del arte.

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