Bach, Ravel o Mozart nunca hubieran pensado que sus piezas pudieran tocarse con guitarras eléctricas. Un grupo de 19 rockeros se han unido para tocar versiones de música clásica con sus guitarras eléctricas.
Estas guitarras, acostumbradas a tocar otros géneros, se transforman para la ocasión en triángulos, violas, cajas o los instrumentos que hagan falta para representar las melodías. Hasta las partituras se modernizan, para lograr el sonido deseado los músicas juegan con los amplificadores.