Una carta escrita hace 100 años en el Museo del Prado demuestra la similitud de los problemas de nuestros antepasados

Un sobre, dos cartas y una moneda son los enseres que dan forma al 'secreto' que esconde el madrileño Museo de El Prado. José Ramos Moreira es la persona al que le pertenecen estos antiguos objetos del pasado, que cobra valor en la actualidad.

En 1923, Ramos trabajaba como portero dentro de la pinacoteca. Junto con dos amigos, le dio por esconder varias cartas debajo de una estatua, bajo los pies de Carlos V.

Allí permanecieron hasta 2008, cuando un trabajador del museo las encontró aunque la noticia se haya conocido recientemente.

Un día, la estatua se había retirado para una exposición, por lo que interpretan que la estatua no era el escondite ideal para depositar la misiva.

Lo que más llama la atención, es que la carta estaba escrita para sus futuros compañeros. En ella, denunciaba la precariedad de los salarios pues no les daba "ni para vino ni para tabaco".

Para más inri, escondieron una perra gorda de las de entonces. "Desde el infierno", concluye la misiva.