Muchos madrileños desconocen que el monumento de Alfonso XII en el Retiro esconde un mirador. Este miércoles se reabre a las vistas tras 30 años cerrado y hemos tenido el privilegio de entrar antes que nadie.
Tras 97 escalones, nos elevamos a 30 metros de altura. En el interior descubriremos la obra del catalán Jose Grasse, la estatua de Benlliure y la inauguración en 1922, tras 20 años de andamios.
La proximidad del agua destrozó los materiales de construcción, pero tras las obras de restauración, la capital puede disfrutarse por los cuatro costados.