Titulada "La cocina de la abuela", esta creación se enmarca dentro de una falla dedicada a la cocina tradicional, con presencia de numerosas figuras de cocineros y platos típicos. Representa a una abuela entre fogones, vertiendo comida en la olla, con su nieto. La mujer echa a la olla el contenido de una lata de conserva y trata de acallar las protestas del pequeño. Un jurado, formado por más de 13.000 personas, ha votado para que esta creación sea indultada de la quema fallera.
Evoca la cocina tradicional, con bombonas de butano, embutidos secándose e incluso la presencia de dos ratoncillos que dan cuenta de un trozo de queso y una manzana. El ninot pasará a engrosar la colección del Museo de Ninots Indultats, que se puede visitar durante todo el año.