Ciencia
Tiene 10.000 años y parece que tenga 19: el 3D y la IA reconstruyen el rostro de uno de los esqueletos mejor conservados de Europa
Los antropólogos han reconstruido el rostro de Pepita, uno de los esqueletos mejor conservados de Europa. Apareció en las cuevas de Nerja.
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'Pepita' tiene casi 10.000 años y parece una joven de 19, todo gracias a la tecnología 3D que ha permitido hacer una reconstrucción facial de su rostro.
Los antropólogos han reconstruido la cara de 'Pepita' , el esqueleto que apareció en la Cueva de Nerja y al que se le bautizó con este nombre -su estado de conservación es asombroso- ahora, se le ha podido poner cara, gracias a la labor de la inteligencia artificial.
La joya de oro en el museo
El esqueleto de la mujer apareció en la Cueva de Nerja y ahora es uno de los grandes atractivos de su museo -el Museo de Nerja- junto a una vitrina en la que están guardados sus restos, hay un quiosco digital táctil que permite a los visitantes adivinar quién fue 'Pepita', a través de una serie de mediciones milimétricas.
Las labores conjuntas de la tecnología 3D y la inteligencia artificial, han permitido por primera vez, 'devolver a la vida' a un esqueleto. Otorgando al museo un aspecto de referente nacional en alta tecnología aplicada a la museografía.
Actualización y mejoras
El presidente de la Fundación Cueva de Nerja y Subdelegado del Gobierno de Málaga, Javier Salas, enseñó el proceso para llegar a culminar la reconstrucción facial de 'Pepita' con unos detalles únicos. "Un camino de actualización y mejora de los contenidos que la Fundación Cueva de Nerja ha iniciado tanto en esta fantástica recreación de 'Pepita' como en la Sala de Realidad Virtual en la propia cueva" dijo Salas en la presentación.
Más datos de 'Pepita'
La investigación señala que 'Pepita' era zurda, por la forma en la que tenía colocada sus extremidades. Además, los encargados de analizar el esqueleto pudieron comprobar que había muerto a causa de complicaciones en el parto. Es uno de los esqueletos que mejor se encuentran conservados en Europa, por todo ello se ha convertido en uno de los emblemas del Museo de Nerja.
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