Su primer gran homenaje mediático lo recibieron con la película “Figuras ocultas”, que narra la historia de un grupo de mujeres matemáticas que fueron indispensables en el éxito del regreso del Apollo 11 a la Tierra. Con complejos cálculos matemáticos lograron la fórmula para evitar que la nave se desintegrara al volver a entrar en la atmósfera. Entre ellas figura Katherine Johnson, una afroamericana menuda y centenaria que asegura que: “Nunca falté ni un solo día a trabajar”.
Otra mujer, Margaret Hamilton, diseñó el programa informático que controló el funcionamiento de todos los sistemas durante la misión espacial. El software que diseñó para la NASA marcó un antes y un después en la historia de la informática, ya que era capaz de distinguir qué tareas eran importantes y cuáles no, toda una revolución en aquel momento. A todas les llegó tarde el reconocimiento tarde y, por acabar con otra canción relacionada con la Luna, nos permitiremos la comparación de su trayectoria con el tema Blue Moon, que se escribió cuatro veces hasta que pudo brillar.