Báltico
Científicos encuentran una extraña megaestructura milenaria bajo el mar Báltico
Se trata de un muro de piedra de casi un kilómetro de largo que los investigadores señalan que podría haber sido empleado para cazar renos.
Publicidad
Un grupo de geólogos ha encontrado una extraña megaestructura milenaria en el fondo del mar Báltico. Los investigadores exploraban en el golfo de Mecklemburgo, una bahía al sudoeste de la zona, para buscar acumulaciones de magnesio cuando se toparon con este muro de piedra. Se trata de una hilera de piedras de casi un kilómetro de largo en el fondo del mar que habría sido utilizada para la caza de renos.
Esta megaestructura data de la Edad de Piedra, hace más de 10.000 años. Los científicos observaron que desafiaba toda explicación natural y que debió haber sido construida por el ser humano. Luego fue tragada por el mar Báltico. El equipo está dirigido por Jacob Geersen, de la Universidad de Kiel, en Alemania. Han bautizado este descubrimiento como Blinkerwall.
Importante para comprender la subsistencia
En su estudio, los investigadores detallan que "el sitio representa una de las estructuras de caza artificiales más antiguas documentadas en la Tierra, y se encuentra entre las estructuras de la Edad de Piedra más grandes conocidas en Europa". "Será importante para comprender las estrategias de subsistencia, los patrones de movilidad e inspirar debates sobre el desarrollo territorial en la región del Mar Báltico Occidental", agregan.
Este muro milenario está formado por 1.673 piedras individuales de un metro aproximado cada una, colocadas unas al lado de las otras a lo largo de una distancia de 971 metros. Pese a que la mayoría de piedras no llegan a los 100 kilos, hay una situada en el tramo central que supera los 11.000 kilos, y otra situada al final de la estructura que pesa casi 6.000 kilos.
Los expertos recurrieron a métodos geofísicos que les permitieron crear un modelo 3D detallado del muro y reconstruir su antiguo paisaje. Usaron imágenes hidroacústicas de alta resolución, un vehículo submarino autónomo y buzos humanos para explorar la bahía y poder mapear la verdadera extensión de la estructura.
No es el primer sorprendente descubrimiento de los últimos años ya que se han encontrado otros similares en Michigan, en el fondo del lago Huron, a unos 30 metros de profundidad. Asimismo, no se descarta la existencia de otros muros de piedra del mismo estilo en otros lugares de la Bahía de Mecklemburgo.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com
Publicidad