Energía solar

Un barco propulsado únicamente por energía solar: así es la novedosa embarcación creada por universitarios gallegos

El equipo del CES UVigo (Clean Energy Ship) lleva desde 2021 trabajando para impulsar y desarrollar una nave cuya única energía es solar.

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Boeiro 1, así se llama el pequeño buque diseñado y elaborado por jóvenes estudiantes de la Escuela de Ingeniería de Telecomunicaciones de la Universidad de Vigo. Una embarcación que rompe con la tendencia dominante en lo que se refiere al transporte marítimo. Y es que, cada año, los grandes buques envían a la atmósfera más de mil millones de toneladas de CO2.

No obstante, el Boeiro 1 no es una gran nave contaminante, sino más bien todo lo contrario: se trata de una embarcación de competición de 6 metros de eslora y 2 de manga, compuesta por un motor, placas solares sobre toda la cubierta, varios 'hidrofoils' (es decir, unas estructuras que permiten estabilizar y propulsar la nave en el agua) y una batería con capacidad de hasta 15 minutos.

Marcos Pardeiro, coordinador actual del CES UVigo, nos explica que a lo largo del proyecto "nos hemos enfrentado a problemas con los que se encuentran ingenieros cada día", algo que les ha permitido mejorar como profesionales, al tiempo que preparaban al Boeiro 1 para su botadura.

La idea surge, en palabras de Pardeiro, "con el objetivo de acercar a los estudiantes de Ingeniería al mundo real", un propósito que combinan con otro: competir en eventos de rango internacional con otras universidades.

Navegar con energía solar

Según Lorena Gil, líder técnica del CES UVigo, su objetivo también es otro: "Navegar el máximo tiempo posible utilizando solo energía solar", poniendo el foco en la reducción de los consumos. Ahora mismo, de hecho, sus esfuerzos se centran en tratar de reducir el peso de la estructura para maximizar la eficiencia energética.

El proyecto de estos jóvenes es de carácter multidisciplinar, implicando a alumnos y alumnas de diferentes ingenierías: "Ahora mismo somos 20 estudiantes de distintas ramas, que llevamos desarrollando este proyecto durante más de dos años", reconoce Marcos.

Echando la mirada atrás, la valoración es positiva para Lorena: "Hemos hecho muchas pruebas y hemos visto cosas que fallan, pero intentamos ir mejorando poco a poco". Ahora continúan desarrollando mejoras en la embarcación, a fin de competir contra otros centros en regatas internacionales.

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