Llevar a los niños en el coche en el sentido opuesto al de la marcha puede salvar vidas

David mete a su hijo Darío de 13 meses en su furgoneta como cada día. Usa una silla homologada y, aunque hasta hace poco lo ponía mirando hacia atrás, ahora orienta a su pequeño hacia delante. Como él, el 50 por ciento de los padres creen que esta es la posición más correcta. Sin embargo, un estudio del RACE establece que llevar al niño de espaldas al sentido de la marcha reduce hasta en un 75 por ciento el riesgo de lesiones.

En estas imágenes se puede ver claramente el efecto que tendría un frenazo en el niño en una posición y en otra. Por eso, recomiendan prolongar hasta los dos años la posición del niño de espaldas a la marcha y anteponer la seguridad a la comodidad de los padres.

El año pasado murieron en accidente de tráfico en España 42 menores de 14 años y más de 5000 resultaron heridos. Una siniestralidad que podría reducirse fácilmente.