Los padres iban a celebrar ese día su despedida de solteros porque se iban a casar.
El trágico accidente ocurrió el sábado pasado en la vivienda familiar, en el casco de la villa de Agüimes. La niña comió una nuez y se atragantó. La cercanía del centro de salud a su casa dejó a la pequeña rápidamente en manos de los médicos. Pero, pese a los esfuerzos, tardaron en liberar las vías respiratorias de la niña. Para entonces había pasado más de media hora sin respirar y sufría ya daños cerebrales. Quedó ingresada en el materno infantil donde falleció ayer jueves. La noticia ha caído como una bomba en el pueblo.
Numerosas personas se acercaban hoy al velatorio de agüimes a dar su apoyo a la familia. Los padres de la niña iban a casarse el próximo 12 de julio y en esa misma ceremonia iban a bautizar a la pequeña con el nombre de Ariadna. El mortal accidente se produjo cuando la pareja, de unos 30 años, se preparaba para ir a su propia despedida de solteros.
