El pequeño nació con patología congénita pero no tenía ni historial clínico ni calendario de vacunas
Hasta este pequeño centro de salud de Artenara llegaron los padres con el niño en estado muy grave. El menor, de tres años, murió en pleno traslado en ambulancia. Según el informe forense se encontraba en un estado crónico de desnutrición y deshidratación con atrofia muscular, con erosiones, picaduras de insectos y golpes. La familia, que vivía en esta casa, tiene dos hijos más, que según una vecina, estaban desatendidos. Ella misma, asegura que avisó a servicios sociales.
Desde los servicios sociales en el ayuntamiento niegan que hayan sido avisados.
A pesar de sus graves problemas de salud no tenía historial clínico y no estaba vacunado. Razón por la que la Dirección General del menor tampoco pudo detectar el problema antes.
Según el fiscal los padres desatendieron de forma deliberada los más elementales cuidados y eso derivó en un deterioro físico del menor que le provocó la muerte. Por eso la fiscalía concreta que la imputación debe ser por homicidio. La fiscalía ha pedido que el juicio sea con jurado popular. El caso está en manos de la jueza de instrucción número 2 de Arucas. Los otros dos menores ahora mismo están bajo la custodia de la madre, con la que ha hablado un equipo de antena 3, pero ha rechazado hacer declaraciones.
