El acusado, este hombre británico de 38 años, ha negado los hechos. Pero según la fiscal, Christopher, al percatarse de que su novia hablaba por internet con su ex pareja, reaccionó de forma violenta. Tras golpearla varias veces en el apartamento donde pasaban sus vacaciones, el acusado la llevó hasta la playa de Balitos, un lugar oscuro y solitario, donde le golpeó la cabeza con una piedra. Después la estranguló. La desnudó y arrojó su cuerpo al mar. El cadáver fue hallado varios días después.
Según la fiscal, el acusado quemó sus pertenencias en una hoguera frente al apartamento, salvo su teléfono móvil, del que se apropió para enviar mensajes a su familia y amigos, simulando ser la joven. Los padres no le creyeron y denunciaron su desaparición. Algunos de los familiares de Sara, que estuvieron presentes en la sala, no pudieron reprimir las lágrimas al escuchar cómo murió la joven, de tan solo 23 años. Se pide para él 20 años de prisión.