Día duro para la familia de Isabel Canino. Después de dos años han tenido que revivir todo lo sucedido aquel mes de marzo de 2009: desde que se dio por desaparecida a Isabel hasta que su cuerpo fue encontrado en una fosa séptica.
A los medios de comunicación se les ha prohibido grabar la declaración del acusado, Salvador Morales. Únicamente se ha permitido que se recoja la exposición de las partes donde se detalla la causa de la muerte.
Sin grabar pero estando presentes los medios y el público de la sala, han sido testigos de cómo Salvador Morales negaba que la hubiese matado. Sí que reconocía que la enterró en la fosa séptica de una piso que tenía en alquiler. Dice que se la encontró muerta después de salir a hacer unos recodos y que los nervios y el tratamiento que estaba tomando le hicieron tomar la decisión de esconder el cuerpo y que aún hoy se sigue preguntando por qué tardó 70 días en reconocer lo que había hecho. La Fiscalía y la acusación particular piden 20 años de prisión y la defensa 2 por encubrimiento.
