Visita un pequeño pueblo en Japón y se lleva un gran susto al descubrir quienes son sus terroríficos habitantes

Un viajero ha ofrecido una mirada dentro de una aldea japonesa desierta que esta habitada por espantapajaros.

Norman Nakamura, de 36 años, pasa sus días viajando por el país de Japón, buscando algunas de las gemas ocultas más singulares del país.

Al dirigirse a la aldea de Nagoro, en Shikoku, Norman se topó con lo que a primera vista parecía ser una comunidad tranquila y llena de habitantes-

Pero después de mirar más de cerca, Norman se dio cuenta de que era una de las pocas almas vivientes en todo el pueblo, ya que la mayoría de la población de Nagoro ahora son espantapájaros espeluznantes e inmóviles.

La aldea está situada en el valle de Iya, un área montañosa alejada en la isla de Shikoku. Anteriormente tenía unos 300 habitantes, pero la disminución de la población ha hecho que cayera a 30 en agosto de 2016.

Todo comenzo cuando Tsukimi Ayano, cuya familia abandonó la zona cuando era niña, regresó a Nagoro a principios de la década de 2000 para cuidar a su padre, e hizo un muñeco a su semejanza que colocó en un campo.

Ella ha hecho desde entonces más de 400 maniquíes y espantapajaros que ha colocado por toda la aldea convirtiéndola en una atracción turísitica. Muchos son parecidos a residentes o exresidentes, mientras que otros son personas inventadas.

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