La historia de San Miguel, el del veranillo

"Por el veranillo de San Miguel están los frutos como la miel", dice el refrán. Su santoral fue justo ayer, y por estas fechas, debido a la transición entre estaciones, es cuando se produce una inesperada subida de las temperaturas que conocemos como "Veranillo de San Miguel". En el hemisferio sur esto pasa alrededor del 24 de junio, y allí lo llaman "Veranito de San Juan". En Norteamérica tiene nombre de festival de música y lo llaman "Indian Summer", que debe ser lo único indio que ha quedado por allí después de que exterminaran a casi toda la población.

¿Quién era San Miguel? ¿A qué se dedicaba este santo con nombre de marca de cerveza? ¿Por qué justo cuando has guardado la ropa de verano en el trastero y has sacado la de invierno te fastidia con 30 grados en octubre?

Lo primero que hay que decir es que San Miguel es un tipo muy importante, arcángel nada menos, y capitán de los ejércitos celestiales. Dice el Apocalipsis:

"Hubo un gran combate en los cielos. Miguel y sus ángeles lucharon contra el Dragón. También el Dragón y sus ángeles combatieron, pero no prevalecieron y no hubo lugar ya en el Cielo para ellos."

Tan importante es San Miguel que los Testigos de Jehová y los Adventistas del Séptimo Día afirman que Jesucristo y él son la misma criatura celestial. Claro que los Testigos de Jehová y los Adventistas también han afirmado muchas otras cosas, como que el Fin de los Tiempos iba a llegar no sé cuántas veces en el pasado y no ha sido así ( ignoramos si en el 2020 por fin mandaré todo al garete).

En el islam San Miguel también es muy venerado, se dice que fue uno de los tres ángeles que visitaron a Ibrahim ( Abrahán) para anunciarle el nacimiento de Isaac y Jacob. En la tradición islámica San Miguel está la mar de cómodo, porque vive en el séptimo cielo.

En la tradición rabínica judía, San Miguel tiene estudios universitarios: se le considera el "abogado de Israel" frente a su acusador Satanás. Todo esto dio lugar a la famosa serie de abogados "La Ley de los Ángeles", creo.

San Miguel es un santo nada tímido y se ha aparecido en la Tierra muchas veces. Por ejemplo, el emperador Constantino le atribuía la derrota de sus adversarios. El Papa Gregorio Magno no iba a ser menos y dijo que se le apareció un día a las puertas de casa, en Roma, en el Castillo de Sant´ Angelo, al lado del Vaticano. Es lo que tiene ser Papa, que te vienen los santos a casa.

A Juana de Arco también se la apareció en una ocasión, dicen que en su calidad de guerrera (imaginamos que para darle consejos militares); y a Santa Margarita, a ésta en calidad de domadora de dragones, ahí es nada.

Por supuesto, se cree que también se apareció en Fátima, antes de las famosas apariciones de la Virgen, para ir preparando el terreno, en plan becario.

Antes de que apareciese el culto a San Miguel, por estas fechas se adoraba a otro ser mítico más partidario de hacer el amor y no la guerra: Afrodita, protectora de los membrilleros, que recogen ese fruto por estos días. De ahí que se diga que el membrillo es el fruto del amor. Vale, y la banana.