Publicidad

El cambio se abre paso

El cambio se abre paso

Las urnas mandan. El cambio se abre paso. Los ciudadanos han hablado, han castigado la corrupción y piden otra manera de gestionar mejor las cosas que les resultan más cercanas. Como una apisonadora han irrumpido los nuevos. En Cataluña se han llevado por delante los planes independentistas. Ya hay quien vaticina que si finalmente se celebran las elecciones plebiscitarias del 27 de septiembre, el soberanismo recibirá la puntilla. De momento Ada Colau ha desahuciado de la alcaldía al convergente Trías, que ha querido hacer de Barcelona un bastión independentista cuando Barcelona es el mejor ejemplo de multiculturalidad.

Las urnas mandan. El cambio se abre paso. Los ciudadanos han hablado, han castigado la corrupción y piden otra manera de gestionar mejor las cosas que les resultan más cercanas. Como una apisonadora han irrumpido los nuevos. En Cataluña se han llevado por delante los planes independentistas. Ya hay quien vaticina que si finalmente se celebran las elecciones plebiscitarias del 27 de septiembre, el soberanismo recibirá la puntilla. De momento Ada Colau ha desahuciado de la alcaldía al convergente Trías, que ha querido hacer de Barcelona un bastión independentista cuando Barcelona es el mejor ejemplo de multiculturalidad.

Publicidad