¿QUÉ HACE A DÍA DE HOY?
Monica Lewinsky, su vida ahora tras el escándalo sexual con Bill Clinton que le marcó para siempre
Nadie podrá olvidar la gran polémica que se levantó cuando
salió a la luz el escarceo sexual que Bill Clinton tuvo con la becaria más
famosa de todos los tiempos: Monica Lewinsky. Mucho tiempo ha pasado ya, pero
lo cierto es que a ella le ha costado mucho poder hacerse un hueco y continuar
adelante con su carrera profesional. Ahora se dedica a proyectos solidarios y
campañas contra el acoso cibernético, pero no ha sido un camino fácil encontrar
su sitio.

Publicidad
Todo el mundo recuerda el escándalo sexual que vivió en su
día Bill Clinton con la becaria más famosa de todos los tiempos: Monica
Lewinsky. Cuando el escarceo amoroso de Bill, casado con Hilary, salió a la
luz, él lo negó todo, pero ella tenía guardado un as en la manga: una mancha de
semen en uno de sus vestidos.
Las pruebas de ADN demostraron que, efectivamente, se
trataba de Bill, lo que supuso que el que fuera entonces presidente de los
Estados Unidos se tuviera que enfrentar a un proceso de impugnación por
perjurio, abuso de poder y obstrucción a la justicia. Aun así, y aunque su
imagen quedó dañada, salió mejor parado que Lewinsky.
Y es que Monica sufrió mucho la repercusión del escándalo,
se llegó a comentar incluso que quiso quitarse la vida. Es más, mucho trabajo
le costó arrancar de nuevo ya que nadie quería contar con ella. Así que tras
desaparecer por un tiempo de todo, regresó con una empresa llamada ‘The Real
Monica’ en la que vendía bolsos de punto reversibles, pero volvió a hablar del
escándalo e incluso sacó un libro, ‘Monica’s Story’, por el que obtuvo
cantidades millonarias. Más tarde anunció dietas adelgazantes de la firma Jenny
Craig, pero supuso un auténtico fracaso, lo que llevó a que la marca le pagase
menos de la mitad de lo prometido.
Después de eso decidió marcharse a Londres y comenzó a estudiar
psicología social y vivió en diferentes sociales, se reinventó y ahora trabaja
en diferentes organizaciones solidarias. Además, apoya muchas causas
relacionadas con el acoso cibernético y otro tipo de exclusiones sociales. En
su día, ella supo lo que era vivir excluida en carne y hueso, por lo que ahora
se dedica a ayudar a las personas que tienen este mismo tipo de problema. Por
otro lado, también colabora con la revista Vanity Fair, pero dejando de lado el
tema Clinton.
Publicidad