El capítulo 8 ha terminado con una imagen que nos ha dejado a todos con la boca abierta: Ana ha dejado Alberto plantado en el altar. Nos colamos en esa iglesia, vemos cómo fue rodar esa escena, y conocemos qué piensan los actores de la decisión de Ana.

En el mismo capítulo en el que Cristina continúa con los preparativos de su boda. Hay que elegir canción, por ejemplo, para abrir el baile. Cuál hubiera elegido Miguel Angel Silvestre si fuera él el protagonista de la boda.

Todo esto en un día en el que las máquinas del taller empiezan a funcionar para preparar el desfile con la nueva colección de Raúl de la Riva. Aunque no a todos en la galerías les gustan los diseños. Vemos cómo fue rodar esas dudas y la votación entre los miembros del consejo.

Mientras en la zona de los empleados, Manolito pasa su primera noche en las galerías. Pedro tiene que empezar a ejercer de padre (matricularle en un colegio, criarle y decidir si abandona las galerías y se traslada con él a una casa de huéspedes). Indagamos para ver cómo eran las escuelas en aquellos años y tomaremos buena nota de los libros que existían entonces para "enseñar" a las buenas esposas, como el que le regala Rita a Pedro.

Pedro en labores de padrazo y Clara que ya es libre para vivir su gran noche con Mateo. Cómo fue rodar esa escena en plena Casa de Campo de Madrid, ¿por la noche?

A todo esto, Luisa está de luto. Su marido ha aparecido muerto y descubrimos cuánto tiempo, según las normas de entonces, tendrá que vestir de negro ella. Rodar la escena del entierro no fue fácil, descubriremos por qué.