Julio Olmedo, un joven de origen humilde, viaja a Cantaloa para visitar a su hermana Cristina; una de las doncellas del Gran hotel.  Pero al llegar Julio se topa con una ingrata sorpresa; hace más de un mes que nadie sabe nada de su hermana Cristina después de que haya sido expulsada del hotel por un supuesto robo. Convencido de que hay algo oscuro en la desaparición de Cristina, Julio decide quedarse en el Gran Hotel.

Con la ayuda de Andrés, uno de los camareros, y ocultando que es hermano de Cristina, Julio logra entrar a trabajar como camarero del Gran Hotel con la intención de investigar lo sucedido con su hermana. Pero en el transcurso de su investigación Julio se topa con alguien inesperado; Alicia,  una mujer elegante y distinguida con la que Julio ya se cruzó antes de tomar el tren a Cantaloa y que no es ni más ni menos que la hija de Doña Teresa Alarcón, la propietaria del Gran Hotel.