Olmo descubrirá que la enfermedad de su madre se ha estancado y verá en el despiste de no habérselo contado toda una conspiración. Además el joven no aprueba la amistad que Águeda comparte con Raimundo, cree que es una falta de respeto a la memoria de su padre.

Cuando se desahogue con Soledad descubrirán que tienen mucho en común, pues la misma humillación que siente él con Águeda la siente Soledad con Juan.

Alfonso y Emilia amanecen como marido y mujer, felices de poder compartir toda la vida que tienen por delante.

Sebastián va a reunirse con su contacto del ejército… a Raimundo todo le huele muy mal. Y es que el padre no se fía de Sebastián, cree que sus negocios no están en la vía de la legalidad y Raimundo acierta; Sebastián no ha arreglado los quemadores. Sebastián puede meterse en un lío muy gordo si no puede esterilizar correctamente las conservas.

Juan ha ido a ver una venta para poner ahí su negocio… ¿Qué planea este chico?

Un paisano de Puente Viejo sufrirá el ataque del ánima. Cuando Tristán se lo cuente a su madre esta se pondrá muy nerviosa. El ánima volverá a atacar… Paquito querrá darle caza. Mariana querrá convencer a Paquito de que vuelva a casa, pero para cuando quieran darse cuenta, tendrán al monstruo a su lado.