Martín ha comenzado deseando suerte a todos los que en estos días se están examinando en Selectividad. Ha confesado que le encantaría que el final de Marcos fuera su reencuentro con su madre, algo que lleva esperando muchas temporadas.

Ha reconocido que El Internado ha sido una aventura mágica, tres años muy intensos, una alegría y un privilegio formar parte de la serie. Martín cree que el gran amor de Marcos ha sido Carolina, y guarda muy buen recuerdo de la época en que grababa con Ana de Armas.

En cuanto a lo del traidor, Martín ha dicho que no cree que Marcos descubra que Roque es el traidor, pero eso sólo podremos saberlo viendo los capítulos de El Internado.

Ha recordado que la primera escena que grabó en la serie fue con Luis Merlo. Recuerda que fue un momento muy bonito porque Luis es un excelente compañero y es muy satisfactorio trabajar con él. Además, dice que, también, trabajar con Marta Hazas es un placer porque siempre tiene una sonrisa para todo el mundo y es encantadora.