El pueblo queda consternado con la detención de Jimena García, acusada de ser una bandolera que forma parte de la banda del Chato. Sara está desesperada y suplica a Roca poder ver a su protegida en los calabozos pero el capitán es inflexible, diciendo que la detenida no puede recibir ninguna visita. Lo que quiere Roca es que Jimena se derrumbe y confiese quiénes son sus compañeros de partida. Sara pide ayuda a sus bandoleros, pero la situación no es halagüeña.
Jairo también sufre lo indecible al ver que su prometida está entre rejas y Roca, además, le prohíbe acercarse a la detenida. Morales trata de animarle pero resulta una tarea imposible.
El Chato, por su parte, anda preocupado por lo que le pueda pasar a Clara con Olmedo, que descubre un interesante dato acerca del pasado del capitán Roca. Juan decide visitar la posada para vigilar de cerca las evoluciones de Clara con respecto al ex capitán.