Pilar decide enfrentarse al matón que se ha hecho con el dinero que llevaba el Lucero de Linares y, tras la intervención de Morales, todos acaban en el cuartel de la Guardia Civil. Lucero da las gracias a Pilar por ser tan comprensiva con él. Jairo no se quita de la cabeza haber visto a Jimena en el monte. Desobedeciendo al capitán Ferrer, decide ir a casa de Sara para contarle tal hallazgo. Ni Jairo ni Sara saben que Jimena ha sido salvada por unos misteriosos jinetes de negro. Malpartida abandona las cuevas de los bandoleros llevándose la misteriosa Biblia y dejando herido a Juan.