Sara, después de regalar un caballo a Flor, decide plantar cara a Olmedo acusándole de ser el responsable de la muerte de Miguel Romero.

Pepe y el cura están muy preocupados por la decisión que ha tomado Asunción con respecto a cerrar la posada ya que, con sus nuevas normas de castidad, el establecimiento se ha convertido en un negocio totalmente ruinoso. El cura decide hablar seriamente con la ex monja.

Inés comienza a trabajar en el dispensario con mucha ilusión pero Mario, por su parte, no puede disimular ante Fernando y reconoce que no siente amor por esa muchacha aunque no sabe qué hacer para no crearle falsas ilusiones.

El Chato está cada vez más celoso porque no soporta que Lupe trabaje para Álvaro. La joven devuelve al Chato la joya que él le regaló y se siente cada vez más a gusto con el joven Montoro.