Finalmente, Mauro decide volver junto con Inés para intentar olvidar el pasado y comenzar a mirar hacia el futuro. Ninguno de los dos sabe que mientras esto ocurre, la policía ha ido a detener al asesino de sus padres y a su mujer.

Vicente, previendo lo que le viene encima, intenta matar a Emilia y se quita la vida arrojándose por la azotea de la casa.

Fernando se ha propuesto recabar información sobre Bejarano y Alicia interviene para que Héctor, Asunción y Bonilla compartan con él todo lo que saben sobre el comisario.  Por último, Tomás y Roberta se ven impedidos a verse asolas por la presencia de Federico, que ha decidido instalarse en el hostal y acoplarse en la habitación de Roberta, haciendo uso de su derecho conyugal.