Rubén, que se había aproximado a su hermano, es testigo de la fuerte compenetración que hay, como siempre ha habido, entre Valeria y Diego al recordar lo que pasó hace diez años entre ellos dos y que supuso el viaje de Diego a Cuba.

Es el día de la marcha de Pedrito y Felisa. Tristeza y emoción en todos. Pedrito se muestra sorprendentemente colaborador, porque cree que Dorita se va con ellos. Pero ella no puede dejar a su abuela sola.

Don Patricio “toma posesión del barrio” y confraterniza con Sabino y sobre todo con Pelayo por el antifranquismo de ambos. Van juntos al Ateneo a una tertulia, para disfrute de Pelayo… y “saqueo” de la cartera de Sabino.

Por el Ultramarinos aparece un famoso futbolista, Román, acompañado por unos periodistas. Marina, al no conocerlo, le invita a salir de su establecimiento porque lo están poniendo patas arriba.