María, alentada por Loli, miente a sus padres para poder ir con Ángel a Segovia, pero el Rondeño no está dispuesto a permitirlo.

Rosa ofrece su apoyo incondicional a Tomás y habla con Adela para hacerle ver que Tomás está enamorado de ella.

Tomás se niega a cumplir con la nueva misión de la KGB: matar a Franco. Petrov, convencido de que Rosa es la mujer a la que ama, la secuestra para presionarle.

Adela por fin asume que la llave de su felicidad está en su mano y quiere darle una oportunidad a su amor con Tomás.

Para sorpresa de los Gómez, Clara y Nicolás llegan de Barcelona.