Marina trata de conciliar su trabajo con la vida del hostal. Pero la situación no es sencilla ya que Belén la ha obligado a ajustarse a unos horarios muy estrictos. La vida de Marina se complica aún más cuando es testigo de un percance ocurrido a los tenderos de la plaza. Arturo no está dispuesto a tragarse que la caída de Braulio de la terraza se tratara de un accidente. Marcelino le pone al corriente de algo que aumenta sus sospechas sobre la participación de Vicente en la caída. La llegada de un telegrama al hostal supone un vuelco para Belén y la empuja a refugiarse en su habitación. Los intentos de Daniel por enterarse de qué se trata no sirven de nada.

El fiasco del corte de pelo a Manolín ha enturbiado las relaciones entre Manolita y su suegro. Pelayo se compromete a sufragar la peluquería de todos sus nietos durante un año y eso hace que una atractiva y chispeante mujer entre en su vida. Fernando deja la casa de Alicia y tras despedirse de Daniel y Pelayo va a la búsqueda de Valeriano, de quien sabe que anda buscándolo. Cuando el destino los cruza en la plaza intuimos que la suerte está echada para uno de los dos.