Tras las navidades, Augusto y Valeria siguen distanciados y ambos se justifican culpando al otro ante Pilar. Méndez ha conseguido que Augusto participe en un acto político del Movimiento, pero le recomienda que vaya acompañado de su esposa, por lo que Augusto se las arregla para hacer las paces con Valeria.

Por su parte, Diego ha cambiado de idea y se quedará para poner las tierras de Filo en valor.

Antonio regresa de Estepona, a donde le había enviado Marina antes de Navidades. La tía exige a su sobrino que abandone su mal comportamiento si quiere quedarse con ella en Madrid. Antonio acepta y, a pesar de las reticencias de Isidro, consigue gracias a Aniceto, matricularlo en la Academia.

Marcelino, Pelayo, Rufino y Aniceto consiguen abrir la caja metálica que han encontrado siguiendo las coordenadas descubiertas en el billete de lotería. En su interior encuentran una fuerte suma en dólares destinada a la Brigada Lincoln de voluntarios americanos en la Guerra Civil.

Pedro llega para despedirse de Dorita antes de volver al cuartel. Sigue teniendo esperanzas y la chica no se atreve a desengañarle, pero él lo nota y comparte sus tribulaciones con Héctor, que le aconseja que viva el presente.