La presencia de Tomás en el domicilio de Adela y Eugenio genera situaciones de tensión entre la pareja. Aunque a situación parece provisional, una nueva noticia llegará y lo cambiará todo.

Después de los exitosos resultado del polígrafo, Tomás Contreras va a ser rehabilitado socialmente por el Régimen. Volverá con honores a la Guardia Civil y se le impondrá una medalla que causará una gran alegría en él.

Manolita se compadece de Ramón tras descubrir su fracaso en la prueba actoral. Mientras, en el Asturiano, se vive un divertido episodio con un jarrón lleno de cenizas.