Ángel, decidido a encontrar una nueva forma de pagar la liberación de David al Charro, se ofrece a Xosé para ser un boxeador en una de sus veladas ilegales. El portugués cree que Loli se ha ido de la lengua y carga contra ella.

Guillermo identifica el cadáver de David Montilla, que ha encontrado la guardia civil.

Miguel sufre los efectos de sus numerosas deudas contraídas y de los discursos de Marcelino ahora que es novio formal de su hija.

Sofía sueña con su padre, que sigue vivo sufriendo en cárceles rusas.