Alicia evita que Fernando mate a Valeriano en plena calle. Inés y Mauro han hecho el amor, nos enteramos de que Inés era virgen. Valeriano intenta convencer a Fernando de que no hubo ninguna traición, pero Fernando, obsesionado se resiste a creerlo. Poco después, Fernando, en su paranoia, está a punto de matar al portero de Alicia. Alicia se enfrenta furiosa a Fernando y le hace ver que ha entrado en una espiral de manía persecutoria que le está haciendo enloquecer.

Arturo se presenta en casa de Inés para hablar con ella sobre la muerte de Braulio, y descubre que Mauro y ella están liados. Héctor y Asunción sospechan del accidente sufrido por Bonilla, no creen que fueran disparos fortuitos. Puesto en contacto con Vallejo, Héctor descubre que por las circunstancias en que se produjo el tiroteo, es evidente que a Bonilla le dispararon sus compañeros por la espalda.

Belén, confiesa a Daniel que el telegrama que ha recibido anuncia el regreso de su hermano, un tipo cínico y despreciable que arruinó a su familia, pero que lo que preocupa a Belén ahora es lo que pensará cuando se entere de que su hermana, viuda, está liada con un sacerdote. Marina está muy agradecida a Daniel por dejarla coser por las noches en la cocina, aunque está preocupada porque sabe que esa solución no puede ser definitiva. Inés discute con Arturo cuando éste la reprocha que este liada con Mauro. En un encuentro en la calle, Ricardo amedrenta a Héctor y Asunción, les acusa de estar tras la desaparición de Ramiro Pardo y les asegura que está tras ellos. Arturo tiene un enfrentamiento con Mauro, finalmente, furioso con él, le amenaza veladamente con decirle a Inés lo que ocurrió con la marquesa.