A la vidente, Amparo Cuevas, llevamos una década sin verla mientras que los beneficios de la Fundación de esta empleada de hogar y madre de siete hijos, siguen subiendo. Miles de fieles se concentran en Prado Nuevo, en El Escorial con la pretensión de que allí se construya una Iglesia de peregrinación.

Pero la Fundación también tiene numerosos detractores. Javier Bueno se queja de que su hermano ha donado tiodos sus bienes a la Fundación y que no le dejan hablar con él, "le tienen secuestrado mentalmente", dice. Asegura que padece un trastorno bipolar y que en muchas ocasiones, no es dueño de sus decisiones. Por su parte, Gloria no tiene duda y dice que a su hermana y su madre les han lavado el cerebro. Primero entró su hermana, hace 28 años, y ésta convenció a su madre para unirse hace 4. Desde ese momento han cedido todos sus bienes y no ha podido hablar cone ellas.

Pedro Besarri es el portavoz de la Asociación de Reparadores de El Escorial y ha acudido por primera vez a un plató de televisión. "Son todo mentiras. Lo cierto es que los tribunales no han estado dando la razón sistaméticamente con numerosas sentencias. Sencillamente estas personas no han asumido que sus familiares hayan decidido entrar en nuestra congregación", se defiende