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ES UN ORGANISMO DESBORDADO
El Fogasa tarda una media de 15 meses en pagar a los trabajadores
Hay miles de trabajadores que no están cobrando las indemnizaciones que les corresponden por su despido y que asume Fogasa cuando la empresa no puede pagar. El Fondo de Garantía Salarial también está colapsado y se está retrasando en los pagos en algunos casos, hasta un año y medio.
El Fogasa, Fondo de Garantía Salarial, es un Organismo autónomo adscrito al Ministerio de Empleo y Seguridad Social, y su función principal es garantizar a los trabajadores que van a cobrar salarios o indemnizaciones pendientes de pago porque su empresa se ha declarado insolvente o en un procedimiento concursal. Es decir, cuando una empresa no puede hacer frente a sus deudas, el Fogasa cubrirá el pago de los salarios devengados e indemnizaciones pendientes. Los beneficiarios son todos aquellos trabajadores que tengan con la empresa un contrato laboral.
Pero, ¿en qué casos exactamente y cuánto abona el Fogasa?. Abona a los trabajadores los salarios con sus pagas extraordinarias, incluidos los salarios de tramitación, que se encuentren pendientes de pago. La cantidad máxima que abona el Fogasa la obtenemos multiplicando el triple del salario mínimo interprofesional diario, con el prorrateo de pagas extras, por el número de días pendientes de pago, y con un máximo de 150 días.
En el caso de las indemnizaciones, el Fogasa abona a los trabajadores que hayan sido despedidos de manera improcedente o si queda anulado, y también si se extingue el contrato por voluntad del trabajador, causas económicas, técnicas, u organizativas, siempre en los supuestos de insolvencia, o concurso de acreedores de la empresa. La cuantía de la indemnización asciende al importe de 20 días por cada año trabajado. Ahora bien, hay una excepción. En las empresas de menos de 25 trabajadores, el Fondo de Garantía Salarial abona el 40% de la indemnización que corresponda al trabajador, y el 60% restante deberá abonarlo la empresa.
El problema llega cuando el organismo encargado dar cobertura cuando las empresas no pagan tampoco puede hacerlo. El Fogasa no tiene ni los fondos suficientes, ni los trabajadores necesarios para abordar la cantidad de trabajo que tienen por culpa de la crisis. El resultado son miles de trabajadores sin despidos, sin ingresos y sin indemnizaciones a las que tienen derecho.
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