Encontramos este anuncio en internet. 'Se ofrece un jarabe casi milagroso'. Sin ninguna evidencia científica, se afirma que cura enfermedades tan graves como el cáncer. En su composición lleva miel de acacia y una variedad de aloe, llamada arborescens. La receta original se la atribuye un religioso brasileño: Fray Romano Zago, quien se presenta ante el mundo como el autor de una fórmula mágica para curar el cáncer.

Descubrimos que este producto ya está en España. Una empresa andaluza lo comercializa. Está ubicada en un polígono industrial cercano a Sevilla y desde allí contactamos con varios herbolarios donde se vende sin ningún tipo de rubor. El aloe supuestamente milagroso es todo un negocio.Un negocio que  puede poner en riesgo la vida de los pacientes con cáncer.

El aloe supuestamente curativo se fabrica en Italia, y un hombre de origen napolitano ha logrado introducirlo en herbolarios españoles. Según la documentación que obtenemos en una parafarmacia, el distribuidor exclusivo para España es Fulvio Carbone, un italiano residente en Sevilla que se presenta en público como una especie de gurú, un iluminado capaz de lograr la curación del cuerpo y el alma.

Contactamos por teléfono con la empresa que distribuye en España el falso aloe curativo. Pedimos hablar con el responsable del producto para que nos explique sus efectos y nos citarnos con Fulvio Carbone en una cafetería. Le contamos que sufrimos un supuesto cáncer de útero y le preguntamos si el aloe que él vende puede ayudarnos. Le pedimos que nos explique cómo actúa el aloe que intenta vendernos, "Es vibracional. Viene de otro planeta, no se cómo decirlo. es un producto que te devuelve a tu solo natural". Todo un falso remedio, que además de acabar con tumores malignos, puede frenar, según nos dice, un sinfín de enfermedades. Un tratamiento de sólo cuatro meses puede costarnos más de  mil euros.